Vitamina C, la vitamina de la piel

La receta perfecta para reducir manchas, arrugas y devolver la elasticidad a la piel

La vitamina c es un gran antioxidante y es considerada la “vitamina de la piel”. Es conocida también como ácido ascórbico y se descubrió a partir del año 1928, aunque anteriormente lo consumían los marinos que venían a América para la cura del escorbuto.

Esta vitamina es muy conocida porque previene y acelera la curación de las enfermedades típicas del frío, y aparece ligada al “resfriado” en todas las revistas de salud. Pero esta vitamina tan típica del invierno también tiene sus efectos cosméticos.
Se ha demostrado que la vitamina c actúa eficazmente en la síntesis del colágeno, la proteína que ayuda a mantener la elasticidad de la piel.

Sus principales beneficios son:

• Antioxidante de la piel al 100%
• Más colágeno, para una piel más tersa
• Menos arrugas, manchas y capilares rotos
• Revitaliza e ilumina la piel
• No tiene contraindicaciones

Administrada por vía tópica- es decir, externamente a través de pomadas, cremas y otras preparaciones cosméticas-, consiguen niveles en la piel hasta 30 veces superiores que cuando se administra oralmente.

¿Sabías que?...
La vitamina c en productos cosmiátricos o estéticos, una vez abiertos, deben ser utilizados diariamente ya que a los 15 días se oxidan y pierden su efecto.